La vieja recomendación de ingerir vitamina C para frenar la gripa parece ser cierta, pero siempre queda una duda: ¿cuánta dosis?
Docenas de estudios en animales han demostrado que esa vitamina alivia infecciones provocadas por distintas bacterias, virus y protozoarios, pero la importancia en infecciones humanas no es conocida.
Como el resfriado común o gripa (entre nosotros) es la infección más estudiada con respecto a la vitamina C, la mayoría de estudios ha usado una dosis modesta de solo 1 gramo por día.
Harri Hemilä, de la Universidad de Helsinki, en Finlandia, analizó datos de dos estudios sobre los efectos de dosis de vitamina C en la duración del resfriado. El primero administró 3 gramos por día a dos grupos de estudio, 6 a un tercero y al cuarto se le suministró un placebo.
En comparación con el grupo del placebo, la dosis de 6 gramos acortó las gripas 17 %, dos veces más que la dosis de 3 gramos.
El otro estudio administró 4 gramos por día y 8 de vitamina C y un placebo a diferentes grupos. En comparación con el del placebo, la de 8 gramos por día acortó las gripas 19 %, dos veces más que la dosis de 4 gramos.
Ambos estudios mostraron una relación entre la respuesta significativa de la dosis y la duración del resfriado. La respuesta fue alinear a los niveles de 6 y 8 gramos, por lo que es posible que aún dosis mayores puedan derivar en mayores reducciones en la duración de la gripa.
Hemilä indicó que ha habido propuestas de 15 gramos al día, pero no se han hecho estudios sobre esta cantidad.
Dada la disponibilidad de la vitamina y su bajo costo, sería bueno ver los beneficios de la dosis de 8 gramos al día.
La ingestión de la vitamina C debe comenzar tan pronto como se sientan los primeros síntomas para lograr mayor efectividad.
RAMIRO VELÁSQUEZ GÓMEZ
Los temas de la ciencia, la astronomía y el medio ambiente con énfasis en cambio climático son mis campos de acción periodística. Con vocación por el mundo de los pequeños felinos y la defensa animal.