Son varias las opiniones que recogen los expertos en salud y nutrición, algunos creen que el vaso de leche ayuda por lo que aporta y otros por un tema psicológico.
Durante años se ha creído que tomar un vaso de leche caliente antes de dormir ayuda a conciliar el sueño, tanto que se ha convertido en un hábito y tradición que se ha pasado de generación en generación, hasta considerarse un ‘truco de la abuela’.
Diferentes especialistas han recomendado que la hora ideal para cenar es entre las 18:00 y las 20:00 horas. Esto le da al cuerpo suficiente tiempo para digerir la comida antes de ir a dormir, pues si cena demasiado tarde existe la posibilidad de dificultar el sueño y aumentar el riesgo de problemas digestivos, como el reflujo ácido.
Sin embargo, esto depende de cada persona y los horarios que maneje en su día a día, por lo que en general lo recomendable es cenar faltando 2 horas para irse a la cama, pero en el caso del vaso de leche es tomarlo media hora antes de acostarse. Esto le da al cuerpo suficiente tiempo para absorber los nutrientes de la leche y comenzar a producir serotonina y melatonina.
Según afirman las doctoras Mar Mira y Sofía Ruiz del Cueto, codirectoras de la Clínica Mira+Cueto de Madrid a ‘Welife’ “los lácteos son los alimentos más recomendables para cenar porque nos ayudan a dormir mejor”.
¿Es bueno o malo tomar leche antes de dormir?
Blanca Pombal, fundadora de Pombalfit, nutricionista y entrenadora personal española, aseguró que la leche ayuda a dormir porque contiene un aminoácido llamado triptófano, el cual se necesita para formar la melatonina, una hormona que ayuda a conciliar el sueño; y para la formación de esta, también se necesita oscuridad.
Siguiendo esta línea, Mar Mira y Sofía Ruiz del Cueto consideran que los adultos deben ingerir leche sin lactosa, “ya que se digiere mejor y por las noches debemos incluir alimentos que se digieran bien y que ayuden a tener un sueño reparador”.